Consejos útiles para la limpieza de tu baño
Sigue estos consejos para mantener tu baño siempre impecable
¿Llevas unas semanas muy ajetreadas con el trabajo y apenas tienes tiempo para dedicarte a la limpieza de tu hogar?
Hay unas zonas que si las limpias con menos frecuencia apenas se nota porque no necesitan tantos cuidados pero cuando se trata del baño no hay que dejar pasar sus cuidados por alto ni un solo día.
Manten tu baño siempre limpio
A continuación te ofrecemos una serie de recomendaciones para que mantengas tanto tu cuarto de baño como tu aseo totalmente limpio y reluciente y protejas tu salud.
- Paredes: Es la primera parte por la que debemos comenzar la limpieza. Después tendremos que seguir con todas las superficies planas como pueden ser los estantes o el borde de la bañera. Hay que pasar el plumero para acabar con la capa de polvo y después utilizar un trapito húmedo que lleve algún producto desinfectante.
- Inodoro: Es el elemento más importante del baño porque es el más usado por todos los miembros de la casa a lo largo del día. Hay que pasar la escobilla aplicando un producto especial para esta zona y desinfectar el asiento a diario. Al menos una vez a la semana es imprescindible limpiar a fondo el exterior de la cisterna y la taza del inodoro.
- Lavabo: Hay que limpiarlo diariamente y hay que tener especial cuidado con los desagües y las cañerías. Si aún no cuentas con un cepillo para limpiar botellas por dentro hazte con uno y combínalo con la lejía introduciéndolo en por estos espacios tan estrechos. De esta manera lo mantendrás impecable y desinfectado.
- Ducha: Hay tipos de aguas que vienen cargadas de cal y eso se acaba reflejando antes o después en aquellos elementos del baño por los que fluye. Un pequeño truco para que no nos ocurra esto consiste en echar un chorro de vinagre blanco y dejarlo actuar durante media hora. Después, tan sólo tendrás que aclararlo con abundante agua.
- Bañera: La forma cóncava de la bañera puede contribuir también a que ciertas bacterias u hongos se alojen en ella. Hay que seguir los mismos pasos que en el caso de la ducha pero al tratarse de superficies mucho más grandes, hay veces en las que hay que combinar además otra serie de productos. Si se trata de una bañera de porcelana o de algún esmalte tendrás que seleccionar un producto que no sea abrasivo que después aclararás con agua caliente. Si el material de tu bañera es de fibra de vidrio bastará con limpiarlo con un buen lavavajillas.
- Por supuesto, tampoco olvides elementos que también forman parte del baño en los que se acumula la suciedad como pueden ser la cortina de tu ducha o la mampara. Para evitar que se forme moho en estos lugares deberás dejarlo a remojo en agua con un buen chorro de lejía. En el caso de las cortinas tienes además la magnífica oportunidad de lavarlas a mano o en la lavadora cuando haya acabado el proceso.
- Suelo: Finalmente tenemos que barrer el suelo y fregarlo. Llena un cubo de agua hasta la mitad y mezcla un chorro de amoniaco con otro producto perfumado especial para fregar los suelos.
Si sigues estos consejos tendrás este espacio de tu casa perfectamente habilitado para su uso diario sin correr ningún tipo de riesgo. Simplemente te recomendamos que si hay algún día en el que un mayor número de personas tienen que acceder a él… incide aún más en la limpieza cuando todos se hayan marchado.
